lunes, 29 de junio de 2009

¿ ARMAS PSICOTRÓNICAS?

Tecnología secreta ..



Pueden provocar que una persona escuche palabras en su cabeza, causarle enfermedades físicas y mentales o incluso acabar con su vida. Son las armas psicotrónicas, algunas de cuyas patentes e investigaciones, desarrolladas por el Ejército de EE UU, son conocidas gracias a determinados trabajos periodísticos. Por otro lado, docenas de personas en todo el mundo, agrupadas en la Federación contra el Control Mental, aseguran que son víctimas de experimentos secretos con esta clase de desarrollos armamentísticos.
Las últimas investigaciones sobre el control y la manipulación del cerebro han posibilitado el desarrollo de las terribles armas psicotrónicas. Su base científica reside en el descubrimiento de que el ser humano es un organismo electromagnético cuyo «funcionamiento» se puede alterar mediante señales de ondas en determinadas frecuencias. Precisamente, los primeros que anticiparon el peligro de esta clase de armamento fueron los físicos atómicos, aunque serían psiquiatras, psicólogos y neurólogos los responsables de hacerlas realidad durante la segunda mitad del siglo XX.

El 4 de septiembre de 1955, el coinventor de la bomba atómica y eminente físico Robert Oppenheimer advirtió del peligro que supondría el uso de estas tecnologías: «Los científicos no hemos prestado suficiente atención a nuestras responsabilidades con la sociedad (…) Desde mi punto de vista, los psicólogos no son del todo conscientes del poder que poseen. El progreso en su campo de estudio puede abrir una terrorífica posibilidad: la capacidad de controlar los pensamientos, sentimientos y comportamientos de una determinada población. A medida que progresan en conocimientos, intuyo que estos profesionales ofrecerán la disculpa de que los utilizarán con humanidad; una excusa ridícula comparada con la responsabilidad que van a afrontar».


Afectan básicamente al cerebro, no dejan huella y por tanto no se puede acusar a quienes las usan de los daños que producen pero son numerosas las patentes y las investigaciones secretas que están aflorando a la luz revelando una lamentable realidad que muy poca gente conoce: las llamadas armas psicotrónicas son una realidad. De hecho más de 400 personas de medio mundo se han agrupado en una asociación que asegura aglutinar a víctimas de esos dispositivos, aparatos que pueden llevar incluso a la muerte a quienes son blanco de ellos y que algunos quieren utilizar discretamente para deshacerse de personas incómodas para los grupos de poder.

La existencia de armas psicotrónicas nos devuelve a lo más oscuro de las investigaciones acerca del cerebro y de los efectos de las radiaciones sobre seres humanos, a experimentos llevados a cabo con enfermos psiquiátricos, con reclusos e incluso con meditadores en prestigiosas instituciones estadounidenses como el Instituto Tecnológico de Massachussets o la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Stanford (California). En ambas se confirmaría –tras infinitas pruebas- el fundamento cuántico de que el ser humano es un organismo electromagnético cuyo funcionamiento se puede alterar mediante señales de ondas a frecuencias determinadas. Esto es fácil de entender para quien, por ejemplo, haya utilizado dispositivos como el Quantum-SCIO que si bien envían frecuencias armonizadoras tienen también un uso del “lado oscuro” desconocido para la mayoría. Y es que según Louise Doswald-Beck -abogada especialista en Derecho Internacional y miembro de la División Jurídica del Comité Internacional de la Cruz Roja- y Gerald Cauderay -asesor industrial y científico de la embajada suiza en Moscú (Rusia) y que en el citado comité se encarga de asuntos relacionados con el señalamiento y la identificación de las unidades y los medios de transporte médico protegidos- “pequeñas dosis de energía electromagnética pueden alterar el funcionamiento de las células” (así puede leerse en un informe sobre nuevas armas publicado por ellos en el Boletín de la Cruz Roja del 1 de noviembre de 1990). Conocido este dato no le extrañará a nadie saber que quienes anticiparon el peligro potencial del uso de armas de ondas fueran precisamente físicos; y más concretamente los físicos atómicos abanderados de la mecánica cuántica, por entonces de los pocos en disposición de comprender las inabarcables implicaciones que tiene saber que el ser humano es un ente electromagnético y sus emociones, pensamientos y pasiones pueden “traducirse” a frecuencias y potencias, es decir, cuantificarlas, “parametrizarlas”. De ahí que los servicios secretos de algunos gobiernos interesados en saber si ese conocimiento podía ser utilizado civil y militarmente pusieran a trabajar en ello a neurólogos, psiquiatras y psicólogos.
La doctora Elisabeth Rauscher -física nuclear que dirigía el Laboratorio de Investigación Tecnológico de San Leandro en California (Estados Unidos)- es una de las que por ejemplo llevó a cabo concienzudas investigaciones sobre las posibilidades de las ondas ELF (siglas en inglés de extremadamente baja frecuencia) y consiguió encontrar frecuencias específicas que permiten inducir a distancia en alguien tanto náuseas como un estado de euforia. Fueron tales sus hallazgos que llegó a afirmar: "Si se me dieran suficientes fondos, en tres meses sería capaz de modificar el comportamiento del 80% de los habitantes de esta ciudad sin que lo sepan. Podría hacer que fueran felices o -al menos que se creyeran felices- o hacerlos agresivos". Quizás al lector le parezca una afirmación enormemente pretenciosa pero ya en diciembre de 1965 el doctor David Krech -de la Universidad de Berkeley en California (Estados Unidos)- había afirmado en un artículo publicado en The New York Times que “los investigadores deben plantearse ya la posibilidad de que sus estudios les lleven a conseguir controlar las mentes de los seres humanos. Creo que no me paso de melodramático: las posibilidades futuras de tomar el control de una mente conllevan mucho más peligro que las capacidades que puedan llegar a tener los físicos nucleares”.
Que fue escuchado es obvio: pocos años después inconfesables investigaciones dieron lugar a lo que dio en llamarse armas no letales. Apenas veinte años después de ese artículo de Krech, en 1984, el capitán Paul Tyler -médico de la marina norteamericana responsable de la investigación sobre los efectos de las radiaciones en humanos- reconocía en el Centro Universitario para la Doctrina Aeroespacial sito en Alabama (EEUU) que "se podían alcanzar efectos biológicos precisos con la ayuda de ondas electromagnéticas”. Es más, Tyler dijo que habían identificado ya esas ondas pero que para poder usarlas de forma operativa tenían que solucionar el problema de cómo transmitirlas con la potencia suficiente (por supuesto ondas ELF).
Añadiremos que la División de Armas Avanzadas de Estados Unidos fue adscrita a una agencia ultrasecreta, DARPA, que por cierto tiene sus instalaciones en el estado de Virginia, muy cerca de la universidad en la que un estudiante coreano llamado Cho Seung-hui llevó a cabo en abril del 2007 una inexplicable matanza. Asimismo se sabe que también se investigó con las microondas en el Centro Militar de Investigación Walter Reed de Washington (Estados Unidos) dentro del llamado Proyecto Pandora. Pues bien, el director del DARPA durante el Proyecto Pandora fue Richard Cesaro -personaje que trabajó cuarenta años en ese campo para la Marina y la NSA, agencia especializada en telecomunicaciones y espionaje- y terminó haciendo público sus objetivos: “Para conseguir un salto tecnológico en el campo militar hay que ir más allá de las bombas y llegar a controlar las mentes de los enemigos”, afirmaría. Añadiendo: “La posibilidad de ejercer cierto grado de control sobre el comportamiento humano mediante microondas de baja intensidad es, a la luz de nuestras investigaciones, algo razonable”. Por lo que instó a continuar las investigaciones. Obviamente el hecho de que estemos hablando de proyectos ultrasecretos hace que las investigaciones puedan en realidad estar más avanzadas de lo confesado. Hay que tener en cuenta que la mayor parte de las evidencias que hoy se tienen del desarrollo logrado proceden casi exclusivamente del antiguo bloque comunista ya que cuando cayó ese régimen muchos archivos secretos salieron a la luz.

ATAQUES CON ONDAS
Ahora bien, no son sólo las posibilidades de las ELF (ondas de extremadamente baja frecuencia) las que se han investigado. También se han estudiado las EHF (siglas en inglés de las ondas de extremadamente alta frecuencia) porque tienen una característica importante: operan en línea recta y pueden dirigirse hacia objetivos muy concretos en lugar de hacerlo sobre zonas más amplias. El investigador Joe Vials publicaría en New Dawn Magazine un artículo en que explicaría que las microondas pueden dirigirse hacia un blanco concreto gracias a un sistema llamado Magnetrón merced al cual los electrones que se producen por calentamiento en un tubo catódico pueden ser dirigidos luego hacia un punto determinado combinando un campo eléctrico y uno magnético. Solo sabemos que se trata de un cilindro hueco cuyo exterior se rodea con emisoras de bario y de óxido de estroncio y que dispuesto concéntricamente en torno a él hay un amplio cilindro de corriente anódica que contiene un gran número de cavidades de resonancia sobre la superficie. El caso es que cuando se pone en macha el Magnetrón produce una corriente eléctrica radiante entre el ánodo y el cátodo mientras el campo magnético es estimulado por el cátodo. El dispositivo se sella en un espacio al vacío. Y auque su potencia está limitada por el tamaño del Magnetrón utilizado las investigaciones ponen de manifiesto que el más potente puede producir una corriente de microondas de más de ¡diez millones de vatios por pulsación! Y que el rayo de microondas que emite puede concentrarse de la misma forma que una lente fotográfica; puede hacerlo pues incluso sobre un punto infinitesimal.
Agregaremos que el primer ataque confirmado con armas psicotrónicas tuvo lugar en 1953 y lo perpetraron los soviéticos atacando con ondas electromagnéticas de baja frecuencia la embajada norteamericana en Moscú (Rusia). Poco antes el Gobierno ruso, en plena guerra fría, se había reunido con el norteamericano para intentar parar la carrera armamentística en lo que a las armas electromagnéticas se refiere pero su ofrecimiento fue rechazado así que éstos decidieron atacar la delegación estadounidense con ellas. ¿El resultado? Varios empleados enfermaron gravemente, muriendo algunos de ellos. Incluido el embajador, Walter Stoessel, cuyos ojos enrojecieron llamativamente y murió a causa de cáncer, concretamente de un linfoma. Como es obvio, las autoridades norteamericanas dijeron ignorar ese ataque durante años pero existe la fundada sospecha de que lo permitieron para investigar los efectos de esas radiaciones. La prueba está en que Henry Kissinger escribió un informe secreto en los años setenta en el que se ofreció una indemnización a los empleados que lo sufrieron.
Años más tarde, en 1976, el Comité del Senado de Derechos Constitucionales publicaría un escrito titulado Estudios de armas de microondas de los soviéticos incluido en el apartado Tecnologías para el control-vigilancia que a su vez citaba lo publicado en Federal Times el 13 de diciembre de ese mismo año. Pues bien, en la página 1.280 se puede leer que “la oficina de inteligencia del Ministerio de Defensa ha publicado un estudio sobre los avances de los soviéticos en el-ámbito de las armas de microondas. Las microondas se usan en el radar, en la televisión y en los hornos microondas. Pueden causar desorientación e infartos en seres humanos. Otro efecto biológico que puede lograrse es crear voces. Es posible transmitir sonidos y palabras para que se escuchen intracranealmente mediante la modulación de señales a una densidad media muy baja. Los avances logrados por los comunistas pueden llevarles a desarrollar un sistema que les permita incidir en el comportamiento del personal de la embajada”.
Tres años después de la publicación de este escrito, en el marco de una conferencia que se dictó en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), los soviéticos darían su visión sobre las microondas e, incluso, proporcionarían una lista de armas de destrucción basadas en ellas describiendo su funcionamiento: “Las armas electromagnéticas –reconocerían públicamente- operan en cierto rango de radiofrecuencias y pueden causar daños en los organismos humanos”. Más tarde se sabría -a través del editorial de Pravda del 27 enero de 1986, como recoge un documental de la BBC- que “los soviéticos habían desarrollado rayos, microondas, infrasonidos y armas genéticas que, en términos de su capacidad destructiva, podían no ser inferiores a las existentes en la actualidad”.
El tiempo confirmaría que todo lo dicho era verdad pues tras la caída del régimen soviético aparecieron hasta 44 publicaciones sobre este tipo de armas. En Estados Unidos los avances en este campo se justificaron hasta entonces por la necesidad de contrarrestar los descubrimientos soviéticos pero tras la caída de la URSS tales armas no dejaron de investigarse; sólo se modificó la justificación. Ahora eran necesarias para controlar a los “enemigos internos”. En otras palabras, decidieron usarse -aprovechando que no dejan huella y por tanto no se puede culpar a nadie de sus efectos- contra “las personas que pusieran en peligro la Seguridad Nacional”. Y parece que son muchas y en todo el mundo. Salvo que se esté utilizando de cobayas a miles de personas en todo el mundo simplemente para perfeccionarlas. Porque, insistimos, no dejan huella. Bueno, quizás el extraño aumento de personas “psicóticas” que cada vez en mayor número tienen que atender los psiquiatras sin que éstos sepan la realidad de las causas de tales “patologías”.
Sólo que muchas de las víctimas sí lo saben. Parte, de hecho, ha llegado a conocerse y hoy se agrupa en la Federación Mundial de Víctimas de Armas de Control Mental. Alfredo Nieto, informático español, es uno de ellos. “En general somos personas que por una u otra razón molestamos en el grupo social en el que estamos. Me consta que hay una red global secreta basada en nanomáquinas que espía el comportamiento de mucha gente y puede influir en sus emociones. Con seguimientos que implican a veces la participación de helicópteros”.
Los miembros de esta organización están de hecho convencidos de que tales armas explican la aparición inexplicable desde hace años de enfermedades fulminantes en muchas personas sanas –inducen sobre todo cáncer al poder alterar gravemente las células-, incluidos conocidos disidentes.
Louis Slesin, director de la revista Microwave (Microonda), sabe que todo ello es posible: “Dado que el cuerpo humano es básicamente un organismo electromagnético -explica- los aparatos que causen interrupción en sus impulsos eléctricos pueden afectar su conducta y su salud. Pero esos programas son tan secretos que los militares no hablan de nada concerniente a ello”.
El catedrático de Filología francés Rudy Andria está convencido por ejemplo de haber sido víctima de esas armas tras tener problemas físicos cuyas causas los médicos no fueron capaces de detectar. “Al principio no sabía por qué sufría dolor de cabeza, vértigos, diarrea, sensación de calor intenso dentro del cuerpo, alternancia de sensaciones de calor y frío, privación de sueño, dolores musculares, calambres en las piernas... pero luego descubrí que hay personas con los mismos síntomas que yo. Somos víctimas de lo que podríamos llamar crímenes electromagnéticos. El problema es que ningún médico quiere informarse. Todos optar por considerarlo un mero problema psiquiátrico”.
Bueno, pues según la mencionada federación de víctimas serían ya entre 100.000 y medio millón de personas en el mundo las que habrían sufrido o sufren agresiones con armas psicotrónicas. Solo que, ¿cómo va eso a ser posible? Según ellos porque tales armas están dirigidas desde satélites cuando no instaladas en ellos. Una afirmación que apoyaría el hecho de que hoy día hay centenares de satélites en funcionamiento que mueven billones de dólares en contratos con compañías privadas. Siendo la principal entidad que los gestiona la National Reconnaissance Office (NRO), una institución que fue secreta hasta 1992 y en la que desembocarían todos los programas negros de investigación; es decir, aquellos que escapan al control judicial y parlamentario de los estados. Y es que como dijo hace tiempo un científico ruso “quien controla el espacio electromagnético controla el mundo”. De ahí la carrera espacial.

TECNOLOGÍAS DIRECCIONABLES
Suponemos que el lector se preguntará a estas alturas cómo es posible que las armas psicotrónicas dañen a unas personas y no a las que están al lado. Y la respuesta, como ya adelantamos, es que las modernas armas de este tipo son direccionables, siendo hoy su grado de precisión extraordinario. Algo que lleva a la persona atacada a una agobiante sensación de aislamiento pues las personas de su entorno no le creen cuando cuenta lo que le está pasando.
Es más, se sabe que los investigadores al servicio de estos programas ultrasecretos han avanzado mucho en el ámbito del sonido, que no deja de ser otra onda pero potencialmente inaudible cuando se emite en una frecuencia inferior a la que capta el ser humano. De hecho en la declaración leída en la ONU en 1979 a la que aludimos antes los soviéticos hacían especial hincapié en los sonidos no detectables por el ser humano afirmando que “la variación de sonidos infrasónicos puede ocasionar daños en el sistema nervioso y el cerebro”.
Claro que en este terreno los norteamericanos no se quedaron atrás y de hecho desarrollaron un sonido por encima del grado de frecuencia audible por nuestro oído. Por si lo duda: “El sonido hipersónico se usa -cuenta el US Lab Test en un artículo titulado Sonido hipersónico para uso no letal- para incapacitar a los enemigos. Y es direccionable. Causa desorientación, dolor y náuseas”. Para obtenerlo el Ejército norteamericano trabajó con la patente de un inventor alemán llamado Hans Raida que combinaba alta potencia y baja frecuencia con un potente haz de sonido. Tecnología por cierto –según se afirma en círculos diplomáticos- que actualmente estaría utilizando Israel contra las guerrillas urbanas de Hamás y Hezbolá. Cabe añadir que son muchos los investigadores que han comprobado ya que cuando las neuronas reciben unas dosis de electricidad determinadas sus propiedades eléctricas cambian en la misma forma en la que actúa la memoria. “Uno de los experimentos –cuenta el investigador George Seffens en Defense News al hablar de las nuevas tácticas de guerra urbana- incluye el uso de sonidos que mutan a altos decibelios mientras se amplían los sonidos en las más típicos rangos de la voz o de la transmisión de radio”.

VOCES EN EL CEREBRO
Otro paso más lo supone la posibilidad de crear “voces” en el cerebro. En este sentido Thomas Jensen -del Rush Presbyterian St. Luke’s Medical Center (Missouri, Estados Unidos)- comprobaría que “milésimas de segundo antes de pronunciar una palabra el cerebro emite unas ondas determinadas para esa palabra. Y esas ondas son exactamente las mismas de una persona a otra”. Este dato hizo que Richad Clark -de la Universidad Flinders de Australia del Sur- propusiera el uso de redes neuronales de ordenadores para “reconocer los patrones de aprendizaje de conceptos en los campos eléctricos de la mente. “La CIA –afirma Gary Selden en su artículo Máquinas que leen mentes- ha estudiado sin duda los campos eléctricos u ondas que la mente emite después de haber aprendido algo. Con monitores remotos sería el sueño del espionaje”. Edward Hoffman -subdirector del Instituto Psiquiátrico de Yale (Connecticut, Estados Unidos)- sostiene por su parte que se pueden destruir las voces que “oyen” los esquizofrénicos mediante simples pulsos magnéticos. Y un grupo de neurocientíficos del Caltech (Instituto Tecnológico de California, Estados Unidos) afirma que las intenciones pueden ser leídas directamente midiendo la actividad eléctrica en el córtex parietal. Para comprobarlo en una de sus investigaciones insertaron cables en esa zona de la cabeza a un grupo de monos y grabaron la actividad eléctrica neuronal que aparecía poco antes de que éstos tocaran el cursor para recibir la recompensa. Seguidamente cambiaron las recompensas y las grabaron de nuevo. De esa manera pudieron anticipar qué recompensa iban a elegir: bastaba ver la actividad neuronal que se producía previamente a su acción.
Giorgio Ganis y Stephen Kosslyn -de la Universidad de Harvard en Massachusetts (EEUU)- han constatado además que las mentiras bien organizadas requieren la activación de distintas partes del cerebro y altas dosis de concentración. De hecho comprobaron las diferencias cerebrales que hay entre una mentira espontánea y una elaborada.
Agregaremos que el investigador francés Denis Le Bihan -director de la Unidad de Imaginería Neuroanatómica Funcional de la Comisaría de la Energía Atómica de Francia- afirmaría en la revista Nature del 22 de enero de 1998: “Casi podemos leer los pensamientos”.
¿Meros descubrimientos sin aplicaciones prácticas? Pues si lo piensa sepa que la patente norteamericana 3.951.134 de 1976 –está a nombre de un tal Malech (Robert G., de Nueva York)- describe “un aparato y método para monitorear y alterar el comportamiento de las ondas cerebrales de un sujeto desde una posición alejada mediante señales electromagnéticas de diferentes frecuencias de manera que unas intercedan con las otras para conformar una onda de forma que modula las ondas cerebrales del sujeto en cuestión. Esa interferencia en la onda cerebral será retransmitida por el cerebro del sujeto al receptor que la modulará y ampliará a su antojo”.
Y es que lo que hasta ahora se achacaba a “conspiranoicos” está pasando a formar parte de los medios de comunicación que suelen normalmente dar fe sólo de las versiones oficiales. Un ejemplo cercano: el pasado 10 de febrero el diario español Público contaba que un grupo de científicos australianos había conseguido “leer los pensamientos de unos voluntarios”. Concretamente habían constatado que la decisión de tomar un tipo de bebida u otro se podía saber midiendo simplemente la actividad cerebral en la corteza prefrontal del cerebro mediante una luz infrarroja. Claro que, como antes se explicó, los propios científicos han reconocido que hoy es habitual usar monos –muy parecidos a los humanos- para estudiar en ellos los efectos biológicos de las microondas, incluso las altamente concentradas.
Y si esta práctica de por sí puede sobrepasar los límites éticos todavía lo hace más si tenemos en cuenta que esos experimentos han sido realizados también con humanos. Se tiene constancia por ejemplo de que investigaciones similares se han llevado a cabo en Estados Unidos en el Hospital de Kansas City en Missouri, en la Universidad de Rochester de Nueva York, en los centros Brooks Airforce Space de San Antonio (Texas), en el Johns Hopkins de Baltimore (Maryland), en el Instituto Tecnológico de Massachussets, en la Universidad de Pennsylvania y en otros laboratorios. Incluso en España. De hecho una de las mayores autoridades en la materia es un español, el neurofisiólogo José Manuel Rodríguez Delgado, cuyo envidiable currículo incluye una etapa de docencia de más de veinte años en la Universidad de Yale (Connecticut, EEUU) y que es autor de un conocido experimento en el que un toro de lidia con unos electrodos en la cabeza escapa repentinamente del capote rojo al que se dirigía… pero que también ha experimentado con humanos. En una ocasión, por ejemplo, irradió a cuatro personas con microondas y según explicaría eso les provocó muy diferentes emociones, sensaciones y visiones. Llegando por ello a hacer afirmaciones como que “estas armas son más dañinas que una bomba nuclear”, que “con conocimiento del cerebro podemos transformar, manipular, dirigir o robotizar seres humanos” y que “el principal problema en el futuro será que se robotice a seres humanos sin que se den cuenta de ello”. Y lo dice con conocimiento de causa ya que entre muchos otros inventos el doctor Rodríguez Delgado es responsable del desarrollo de un emisor cerebral que sirve para dirigir a distancia seres humanos como robots. “En el futuro –afirma- podríamos llegar a gobernar de manera inteligente y razonable la fuente de todas las actividades humanas". Otro de sus experimentos consistió en investigar “los ciclos de sueño de los astronautas” según publicó el New York Post el 22 de marzo de 1967.
Terminamos diciendo que un equipo de científicos del Instituto de Descubrimientos del Cerebro y el Comportamiento de la Facultad de Medicina de Georgia (Estados Unidos) dirigido por el doctor Joe Z. Tsien afirmó el pasado 2008 que habían conseguido “borrar” la memoria de un grupo de ratones.

RADIACIONES A CUENTA DEL GOBIERNO
Y no olvidemos al doctor Ewen Cameron, presidente de la Asociación de Psiquiatras Americanos y Canadienses durante largos años y director del Allen Memorial Psychiatric Institute en Montreal (fundado en 1943 con fondos de la Fundación Rockefeller para desarrollar el proyecto de control mental Monarca, una rama más -al igual que el Proyecto Pandora- del famoso MK Ultra) cuyas investigaciones financió la CIA a través de la Fundación Cornell para el estudio de la ecología humana. Porque su equipo consiguió la anulación sistemática de la mente de un ser humano o de su memoria empleando para ello sobredosis de LSD, barbitúricos que le hacían permanecer 56 días seguidos dormido o terapias de electroshock superiores 75 veces a la dosis recomendada. Cameron comprobó que un adecuado condicionamiento psíquico –concretamente la repetición de un mensaje veinticuatro horas al día- conseguía programar una mente previamente vaciada. Unas investigaciones que bien pudieron ser el origen de las torturas de Guantánamo (Cuba) y Abu Ghraib (Iraq) en las que se utilizó la privación sensorial y la repetición ad náuseam de canciones (por ejemplo de Bruce Springsteen que se quejó por razones éticas alegando violación de sus derechos de autor). Claro que las barbaridades cometidas por psiquiatras en nombre de la ciencia podrían llenar una enciclopedia.
Otro ejemplo significativo es el del psicólogo, neurocientífico y profesor universitario en la Laurentian University de Ontario (Canadá) Michael Persinger quien investigó los efectos de las radiaciones electromagnéticas sobre el cerebro para un programa de armas del Pentágono. Persinger perfeccionó los métodos para realizar experimentos de inducción de experiencias subjetivas como -por mencionar algunas- hacer creer a alguien que fue abducido por extraterrestres o que tuvo encuentros con ángeles o con el mismo Dios. Para ello empleaba un casco de motocicleta modificado con realidad virtual que enviaba señales electromagnéticas a la parte delantera del cerebro. Su conclusión fue que “la experiencia humana de Dios puede ser generada mediante procesos que no tienen nada que ver con que Dios exista o no”. Persinger publicó el estudio en 1995 con el título Sobre la posibilidad de acceder directamente a cada cerebro humano mediante inducción electromagnética de algoritmos fundamentales y en él se podía leer, por ejemplo, que “un proceso ligado a la temperatura del cerebro puede permitir afectar a todos los cerebros humanos normales por medio de una frecuencia subarmónica cuya variación a 10 hertzios sería de sólo 0.1 hertzios”; que “las variaciones del ruido dentro de la matriz pueden servir para distinguir entre distintos cerebros. Variaciones al azar del ruido pueden diferenciar entre las mentes de diferentes individuos. En otras palabras, cada individuo puede ser identificado en función de los característicos outputs de su cerebro” o que “la identificación de estas secuencias puede permitir llegar directamente a las más complejas funciones cognitivas asociadas a la personalidad, la conciencia humana y la agregación de representaciones de experiencias”. Es decir, que Persinger está hablando de la capacidad para modificar la conciencia de un individuo, su personalidad o su memoria (agregando recuerdos falsos)… mediante ondas electromagnéticas. La posibilidad de “crear terroristas” a base de torturas y ondas se desprende asimismo de las palabras de este afamado científico que ha aparecido en algunos documentales recientes del televisivo Canal Historia y que sostiene que los procesos mentales pueden ser engañados enviando esta des-información directamente al cerebro. El principio sobre el que se basa para hacer tal afirmación es que la duplicación sintética de la red neuroeléctrica del cerebro generada por los sensores a un estímulo real que excita ese proceso puede producir la experiencia de ese estímulo sin la presencia del mismo. Es decir, un engaño a la mente. Lo que propone el doctor Persinger es que, virtualmente, cualquier estado mental puede ser generado artificialmente desde una fuente exterior. Y lo más aterrador es que los medios para conseguirlo existen ya y son operativos a nivel global. “Los niveles paralelos de potencia para estas amplitudes –explica Persinger- son similares a los que utilizan las señales de radio y los sistemas de telecomunicaciones. En las pasadas dos décadas el potencial para realizar esto se ha desarrollado tanto que lo improbable ya puede ser factible”.
En suma, todas estas evidencias llevan al convencimiento de que hoy se puedan crear asesinos dirigidos por control remoto mediante voces en su cerebro emitidas por su “controlador”. Timothy McVeigh, autor de la matanza de Oklahoma (Estados Unidos) en 1995, decía que el Ejército le había implantado un chip en sus nalgas. El asesino de Robert Kennedy, Sirhan Sirhan, aseguraría no recordar nada de lo que ocurrió el día del asesinato. Y el de John Lennon, Mark Chapman, afirmó que “oía voces”. También en los años 80 y 90 del siglo pasado se hizo famoso Theodore John Kaczynski, un profesor de Matemáticas norteamericano que mató a tres personas e hirió a otras veintitrés enviándoles bombas y que pasó a la historia con el apodo de Unabomber. Lo que poca gente sabía es que a finales de los años 50 ese hombre había sido estudiado por el doctor Henry A. Murray, un psicólogo de la ya mencionada Universidad de Harvard (Massachussets) al servicio de las OSS (Office of Strategic Services), organización que dio lugar a la CIA. Hoy se sabe que Kaczynski participó durante tres años -sin su consentimiento- en un experimento universitario que implicaba tormentos, humillaciones y bombardeo con ondas lo que dejó huellas profundas en su psique. El dato aparece en el libro de Jonathan Moreno Guerras de la mente: investigación sobre la mente y defensa nacional, de innegable valor puesto que el autor conoció directamente al propio Murray por ser amigo de sus padres, también psicólogos.
Walter Bowart, autor del libro Operación Control Mental, afirma por su parte que en 1989 un grupo de mujeres inglesas que se manifestaba contra las armas nucleares sirvió de cobaya al Ministerio de Defensa del Reino Unido para probar algunas clases de rayos de microondas EHF. Sin conocer bien el origen del dolor que empezaron a notar, estas activistas se resguardaron en sus tiendas de campaña. Según las declaraciones de Bowart al fallecido investigador antes mencionado Joe Vials los experimentos con personas siempre que no fueran norteamericanas los apoyó la propia Casa Blanca. En cuanto a los síntomas específicos que presentaron esas mujeres pasaron por ciclos mensuales irregulares, abortos, problemas ginecológicos, quemaduras de la retina, problemas auditivos y hasta tumores de crecimiento rápido. Bowart asegura que cuando sugirió a las manifestantes que cubrieran sus tiendas con hojas de aluminio los efectos cesaron inmediatamente. Según él las microondas rebotan en el papel de aluminio.

ARMAS NO LETALES
Finalizaré diciendo que todas las armas descritas en este texto se conocen bajo el paraguas desinformativo de armas no letales, denominación con la que aparecen en los documentos secretos de la CIA desde los años 60 aunque, curiosamente, su desarrollo ha estado controlado por compañías privadas. De hecho la que fuera Fiscal General de Estados Unidos, Janet Reno, confirmó que “las agencias acordaron desarrollar en común armas que sean válidas tanto para el campo militar como para la seguridad interna”. Así, por ejemplo, la compañía aeronáutica Lockheed Martin afirma sin reparos en la web de su división de Ciencia e Ingeniería -www.seabase.com- lo siguiente: “Proveemos al Gobierno de tecnologías como láseres, sensores espectros trópicos, microondas de gran potencia, campos electromagnéticos y armas no letales (el subrayado es nuestro).
También Vector Microondas Investigaciones está contratada por el Gobierno norteamericano para desarrollar estas tecnologías. Como muestra baste mencionar el premio de investigación otorgado por la CIA que en 1996 recayó en el científico John Craven por dos proyectos: uno llamado Microondas para computadores y otro con el título Láser para comunicación. Aunque como ha quedado claro a lo largo de estas páginas esta carrera armamentística ha sido secreta 25 países han desarrollado ya este tipo de armas, según afirmaría el ex Secretario de Defensa norteamericano Wiliam Cohen.
Y si el lector aún precisa una definición de lo que son esas armas no letales quizás pueda servirle la que la doctora Barbara Hatch Rosenberg recogió ya en 1994 en el Boletín de Físicos Atómicos en el que se puede leer que “las armas no letales utilizan energía electromagnética en frecuencias de láser, microondas, radiación de radiofrecuencias o luz visible pulsada a la frecuencia en la que emite el cerebro”. Agregando que “sus resultados son: ceguera temporal, desórdenes en el pensamiento, dolor severo, náusea, diarrea y disfunciones en los órganos internos”.
Para terminar añadiremos que en la actualidad no existe ningún aparato accesible al público específico para detectar un ataque psicotrónico. Lo más parecido es un Detector de fugas de microondas ideado por un investigador australiano llamado Dick Smith. En su origen ese dispositivo estaba destinado únicamente a rodear la junta de caucho de los hornos microondas para detectar las posibles fugas de radiaciones. Se trata de un detector direccional capaz de recoger una emisión de onda tan leve como un miliwatio por centímetro cuadrado, lo que le convierte en una defensa interesante si se tiene en cuenta que investigaciones médicas realizadas en Estados Unidos también han demostrado que una exposición prolongada a fugas de baja intensidad puede causar problemas serios en los ojos (como cataratas). Estas investigaciones se refirieron a un grupo de mujeres que se habían expuesto a fugas de microondas de esa intensidad en el lugar de trabajo durante muchos meses. Y en cada caso el nivel de perjuicio fue proporcional a la distancia del horno microondas en el que estaba la fuga.
Finalizamos recordando que muchos gobiernos -y las entidades bancarias- quieren ahora que todos los seres humanos llevemos implantados en nuestros cuerpos chips -que funcionan mediante radiofrecuencias- para mejorar la seguridad de las transacciones e implantar en ellos nuestros datos médicos. Sólo que esos chips llevarían un GPS incorporado para saber dónde estamos en cada momento y quizás pudiesen recibir emisiones que desde la distancia nos podrían llevar a enfermar o a la muerte. Bueno, pues ya han empezado a usarlos discotecas de alto standing para que una maquina reconozca a sus clientes habituales y éstos no tengan que esperar en la cola. Y cientos de hijos de millonarios –sobre todo en México y Brasil- ya se los han puesto por si los secuestran.. Quizás más seguros pues… pero sin duda también más controlados. Como le gusta al poder...



Rafael Palacios


Relato de un afectado por armas de control mental
Los miembros de la Federación Mundial de Víctimas de Armas de Control Mental recogen en su web –www.fedame.org- algunos de los casos más significativos de las experiencias que han vivido. Hemos seleccionado uno de ellos como muestra:
“Yo, Fernando Arakaki Miranda, nacido en Brasil y nacionalizado boliviano por tener ascendencia japonesa, viví en Japón entre 1992 y 1998, lapso de tiempo en el que fui manipulado por la tecnología cibernética más avanzada sin mi consentimiento y en contra de mi voluntad a través de implantes de microchips cerebrales. Estos implantes tienen la capacidad de recoger, guardar y transmitir pensamientos, sensaciones, sentimientos e, incluso, pueden ver a través de mis ojos utilizando para ello la tecnología cyborg más avanzada llamada Soul Catcher 2025. Se trata de una telepatía artificial con la que pueden hablarme directamente al cerebro y controlarme hasta en mis sueños. Esto significa que he sido usado como conejillo de indias y ahora están tratando de destruir mi cerebro usando armas de radiación electromagnética –lo que supone, de hecho, una tortura cerebral- y formando grupos de personas para hostigarme día y noche en un intento de acallar este crimen para que quede impune. Estos criminales trabajan sólo para destruir a los seres humanos. Sus actos inhumanos no tienen excusas: son sin Dios ni ley. También usan la mentira engañando a la gente con calumnias en mi contra tratando de aislarme. Es su forma de crear un paranoico esquizofrénico y para este fin hemos contado veintiséis delitos de los que estoy siendo víctima. Entre ellos, amenazas, asociación delictiva, chantaje, injurias, tentativa de homicidio, daños a la salud, daños psicológicos, discriminación, allanamiento, robo, etc. Estos son algunos de los delitos que están usando para encubrir este avasallamiento en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia). Estoy siendo estudiado por universidades de este país como un conejo de indias por la novedad de este implante de tecnología avanzada que mucha gente desconoce en países del tercer mundo. Considero que se están violando mis derechos humanos en toda su magnitud”.


fuente: http://www.dsalud.com/numero115_2.htm

jueves, 18 de junio de 2009

se aprovo el proyecto de ley de responzabilidad de los desmanes ..., kien llama paga.

Ahora los dirigentes se van presos.

El proyecto de ley (Boletín 4821) hace responsable de los desmanes a quienes “hayan llamado, a través de los medios de comunicacion"
Ayer a las 22:35 El proyecto de ley (Boletín 4821) hace responsable de los desmanes a quienes “hayan llamado, a través de los medios de comunicación o por cualquier otro medio, a reunirse o manifestarse”.


El texto del Ejecutivo, ya aprobado por el Senado, se discutió en general en la Sala en segundo trámite constitucional y este martes se votará en particular.

Su finalidad es fortalecer el papel de las policías en la mantención del orden público. Para ello, una de sus disposiciones castiga con penas de cárcel (541 días a 3 años) y multa de 4 a 8 UTM (entre 130 y 260 mil pesos) a quienes cometan desmanes o delitos con su rostro cubiertos (encapuchados).

Responsables civiles

El texto hace solidariamente responsables a los organizadores y convocantes de toda reunión o manifestación pública a realizarse en plazas, calles u otros lugares de uso público, de los daños que los participantes causen, a menos que hayan adoptado todas las medidas razonables para evitarlos.

El proyecto señala que los participantes en reuniones o manifestaciones públicas que causen daños a la propiedad pública o privada, deberán responder civil y penalmente de ellos. En los casos que los daños sean causados por menores de edad, sus representantes legales deberán responder civilmente.

El proyecto señala que, al no haber convocantes oficiales, “se presumirá que son organizadores y convocantes de una manifestación pública, las personas que comunican a la autoridad administrativa competente la realización de dicha actividad de conformidad a las disposiciones generales de policía. En caso que no haya habido tal comunicación, se presumirá que los organizadores y convocantes de una reunión o manifestación pública, son las personas, naturales o jurídicas, que hayan llamado, a través de los medios de comunicación o por cualquier otro medio, a reunirse o manifestarse; o quienes coordinaron el lugar y tiempo de la reunión o manifestación; o lideraron, dirigieron, guiaron o estuvieron a la cabeza de la actividad el día de su desarrollo".

Viernes 12 de junio de 2009

lunes, 15 de junio de 2009

EL SIDA NO EXISTE . ( entrevista a doctor contagiado y confirmacion cientifica sobre mentira del sida )

AQUI EL VIDEO EXPLICA MUY SENCILLO LO DEL SIDA, Y SU MENTIRA.

Entrevista a Manuel , medico y activista del colectivo SAS (Superando a Sida). España, 2008



No está demostrado científicamente que sea un virus contagioso el causante del sida según miles de científicos del mundo, y en este documental, muy censurado, que en España no llegó a emitirse por presiones de la industria farmacéutica, colaboran varios de estos científicos, incluso Kary Mullis (Nobel de química en el 93) o Peter Duesberg, etc... y vale la pena para comprender la que seguramente es la verdadera realidad de todo ésto llamado sida. Infórmate más en http://www.plural-21.org/


Sida. La Duda


PD: Pásalo!!! Es información privilegiada que nos quieren esconder para que no cambien las cosas a mejor.

sábado, 13 de junio de 2009

"EL SISTEMA SANITARIO ES UNA VERDADERA MAFIA QUE CREA ENFERMEDADES Y MATA POR DINERO Y PODER"

Quien hace tal afirmación es Ghislaine Lanctôt, la polémica autora del best seller mundial La mafia médica. En él, esta doctora a la que se ha desposeído de su título de Medicina denuncia el actual sistema sanitario y la corrupción que hay tras el mismo, permitida y amparada por médicos y gobiernos en beneficio de las grandes empresas farmacéuticas y en detrimento de los ciudadanos. De ahí que propugne la vuelta a la soberanía individual sobre la salud como forma de acabar con esa mafia.

Ghislaine Lanctôt ha ejercido la Medicina durante 27 años. Ahora no ejerce... aunque quisiera. ¿El motivo? Hace ocho años la retiraron la licencia de médico. ¿Por qué? Por publicar La mafia médica (Ed. Vesica Piscis). ¿Y qué contiene ese libro -se preguntará el lector- para que haya provocado tal sanción? Pues -como fácilmente se entiende a juzgar por el título- una descripción exhaustiva del "sistema de enfermedad" -y no sanitario- que actualmente existe.

MEDICINA SIGNIFICA NEGOCIO
La autora de La mafia médica acabó sus estudios de Medicina en 1967, una época en la que -como ella misma confiesa- estaba convencida de que la Medicina era extraordinaria y de que antes del final del siglo XX se tendría lo necesario para curar cualquier enfermedad. Sólo que esa primera ilusión fue apagándose hasta extinguirse.
-¿Por qué esa decepción?
-Porque empecé a ver muchas cosas que me hicieron reflexionar. Por ejemplo, que no todas las personas respondían a los maravillosos tratamientos de la medicina oficial. Además en aquella época entré en contacto con varios "terapeutas suaves" -es decir, practicantes de terapias no agresivas- que no tuvieron reparo alguno en abrirme sus consultas y dejarme ver lo que hacían. Y llegué pronto a la conclusión de que las medicinas no agresivas son más eficaces, más baratas y, encima, tienen menores efectos secundarios.
-Y supongo que empezó a preguntarse por qué en la Facultad nadie le había hablado de esas terapias alternativas no agresivas
-Así es. Luego mi mente fue más allá y empecé a cuestionarme cómo era posible que se tratara de charlatanes a personas a las que yo misma había visto curar y por qué se las perseguía como si fueran brujos o delincuentes. Por otra parte, como médico había participado en muchos congresos internacionales -en algunos como ponente- y me di cuenta de que todas las presentaciones y ponencias que aparecen en tales eventos están controladas y requieren obligatoriamente ser primero aceptadas por el "comité científico" organizador del congreso. ¿Y quién designa a ese comité científico? Pues generalmente quien financia el evento: la industria farmacéutica. ¡Si hoy son las multinacionales las que deciden hasta qué se enseña a los futuros médicos en las facultades y qué se publica y expone en los congresos de medicina! El control es absoluto.
-Y eso fue clarificador para usted...
-Y tanto. Darme cuenta del control y de la manipulación a la que están sometidos los médicos -y los futuros médicos, es decir, los estudiantes- me hizo entender claramente que la Medicina es, ante todo, un negocio. La Medicina está hoy controlada por los seguros -públicos o privados, da igual- porque en cuanto alguien tiene un seguro pierde el control sobre el tipo de medicina al que accede. Ya no puede elegir. Es más, los seguros determinan incluso el precio de cada tratamiento y las terapias que se van a practicar. Y es que si miramos detrás de las compañías de seguros o de la seguridad social... encontramos lo mismo.
-El poder económico.
-Exacto, es el dinero quien controla totalmente la Medicina. Y lo único que de verdad interesa a quienes manejan este negocio es ganar dinero. ¿Y cómo ganar más? Pues haciendo que la gente esté enferma... porque las personas sanas no generan ingresos. La estrategia consiste, en suma, en tener enfermos crónicos que tengan que consumir todo tipo de productos paliativos, es decir, para tratar sólo síntomas; medicamentos para aliviar el dolor, bajar la fiebre, disminuir la inflamación... pero nunca fármacos que puedan resolver una dolencia. Eso no es rentable, no interesa. La medicina actual está concebida para que la gente permanezca enferma el mayor tiempo posible y compre fármacos; si es posible, toda la vida.

UN SISTEMA DE ENFERMEDAD
-Infiero que ésa es la razón de que en su libro se refiera al sistema sanitario como "sistema de enfermedad".
-Efectivamente. El llamado sistema sanitario es en realidad un sistema de enfermedad. Se practica una medicina de la enfermedad y no de la salud. Una medicina que sólo reconoce la existencia del cuerpo físico y no tiene en cuenta ni el espíritu, ni la mente, ni las emociones. Y que además trata sólo el síntoma y no la causa del problema. Se trata de un sistema que mantiene al paciente en la ignorancia y la dependencia, y al que se estimula para que consuma fármacos de todo tipo.
-Se supone que el sistema sanitario está al servicio de las personas...
-Está al servicio de quien le saca provecho: la industria farmacéutica. De manera oficial -puramente ilusoria- el sistema está al servicio del paciente pero, oficiosamente, en la realidad, el sistema está a las órdenes de la industria que es la que mueve los hilos y mantiene el sistema de enfermedad en su propio beneficio. Se trata, en suma, de una auténtica mafia médica, de un sistema que crea enfermedades y mata por dinero y por poder.
-¿Y qué papel juega el médico en esa mafia?
-El médico es -muchas veces de forma inconsciente, es verdad- la correa de transmisión de la gran industria. Durante los 5 a 10 años que pasa en la Facultad de Medicina el sistema se encarga de inculcarle unos determinados conocimientos y de cerrarle los ojos a otras posibilidades. Posteriormente, en los hospitales y congresos médicos, se les refuerza en la idea de que la función del médico es curar y salvar vidas, de que la enfermedad y la muerte son fracasos que debe evitar a toda costa y de que la enseñanza recibida es la única válida. Además se les enseña que el médico no debe implicarse emocionalmente y que es un "dios" de la salud. De ahí que incluso exista caza de brujas entre los propios profesionales de la medicina. La medicina oficial, la "científica", no puede permitir que existan otras formas de curar que no sean serviles al sistema.
-El sistema, en efecto, pretende hacer creer que la única medicina válida es la llamada "medicina científica", la que usted aprendió y de la que ha renegado. Precisamente en el mismo número en que va a aparecer su entrevista publicamos un artículo al respecto.
-La medicina científica está enormemente limitada porque se basa en la física materialista de Newton: tal efecto obedece a tal causa. Y, por ende, tal síntoma precede a tal enfermedad y requiere tal tratamiento. Se trata de una medicina que además sólo reconoce lo que se ve, se toca o se mide y niega toda conexión entre las emociones, el pensamiento, la conciencia y el estado de salud del físico. Y cuando se la importuna con algún problema de ese tipo le cuelga la etiqueta de "enfermedad psicosomática" al paciente y le envía a casa tras recetarle pastillas para los nervios.
-Es decir, que a su juicio la medicina convencional sólo se ocupa de hacer desaparecer los síntomas.
-Salvo en lo que a cirugía se refiere, los antibióticos y algunas pocas cosas más, como los modernos medios de diagnóstico, sí. Da la impresión de curar pero no cura. Simplemente elimina la manifestación del problema en el cuerpo físico pero éste, tarde o temprano, resurge.
-A su juicio, pues, dan mejor resultado las llamadas medicinas suaves o no agresivas.
-Son una mejor opción porque tratan al paciente de forma holística y le ayudan a sanar... pero tampoco curan. Mire, cualquiera de las llamadas medicinas alternativas constituyen una buena ayuda pero son sólo eso: complementos. Porque el verdadero médico es uno mismo. Y cuando uno es consciente de su soberanía sobre la salud deja de necesitar terapeutas. El enfermo es el único que puede curarse. Nadie puede hacerlo en su lugar. La autosanación es la única medicina que cura. La cuestión es que el sistema trabaja para que olvidemos nuestra condición de seres soberanos y nos convirtamos en seres sumisos y dependientes. En nuestras manos está pues romper esa esclavitud.
-Y, en su opinión, ¿por qué las autoridades políticas, médicas, mediáticas y económicas lo permiten? ¿Por qué los gobiernos no acaban con este sistema de enfermedad, costosísimo por otra parte?
-A ese respecto tengo tres hipótesis. La primera es que quizás no saben que todo esto está pasando... pero es difícil de aceptar porque la información está a su alcance desde hace muchos años y en los últimos veinte años son ya varias las publicaciones que han denunciado la corrupción del sistema y la conspiración existente. La segunda hipótesis es que no pueden acabar con ello... pero también resulta difícil de creer porque los gobiernos tienen el suficiente poder.
-Y la tercera, supongo, es que no quieren acabar con el sistema.
-Pues lo cierto es que, eliminadas las otras dos hipótesis, ésa parece la más plausible. Y si un Gobierno se niega a acabar con un sistema que arruina y mata a sus ciudadanos es porque forma parte de él, porque forma parte de la mafia.

LA MAFIA MÉDICA
-¿Quiénes integran, a su juicio, la "mafia médica"?
-A diferentes escalas y con distintas implicaciones, por supuesto, la industria farmacéutica, las autoridades políticas, los grandes laboratorios, los hospitales, las compañías aseguradoras, las Agencias del Medicamento, los colegios de médicos, los propios médicos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) -el Ministerio de Sanidad de la ONU- y, por supuesto, el gobierno mundial en la sombra del dinero.
-Tenemos entendido que para usted la Organización Mundial de la Salud es "la mafia de las mafias".
-Así es. Esa organización está completamente controlada por el dinero. La OMS es la organización que establece, en nombre de la salud, la "política de enfermedad" en todos los países. Todo el mundo tiene que obedecer ciegamente las directrices de la OMS. No hay escapatoria. De hecho, desde 1977, con la Declaración de Alma ATA, nadie puede escapar de su control.
-¿En qué consiste esa declaración?
-Se trata de una declaración que da a la OMS los medios para establecer los criterios y normas internacionales de práctica médica. Se desposeyó así a los países de su soberanía en materia de salud para transferirla a un gobierno mundial no elegido cuyo "ministerio de salud" es la OMS. Desde entonces "derecho a la salud" significa "derecho a la medicación". Así es como se han impuesto las vacunas y los medicamentos a toda la población del globo.
-Una labor que no se cuestiona.
-Claro, porque, ¿quién va a osar dudar de las buenas intenciones de la Organización Mundial de la Salud? Sin embargo, hay que preguntarse quién controla a su vez esa organización a través de la ONU: el poder económico.
-¿Cree que ni siquiera las organizaciones humanitarias escapan a ese control?
-Por supuesto que no. Las organizaciones humanitarias también dependen de la ONU, es decir, del dinero de las subvenciones. Y, por tanto, sus actividades están igualmente controladas. Organizaciones como Médicos sin fronteras creen que sirven altruistamente a la gente pero en realidad sirven al dinero.
-Una mafia sumamente poderosa...
-Omnipotente, diría yo. Ha eliminado toda competencia. Hoy día a los investigadores se les "orienta". Los disidentes son encarcelados, maniatados y reducidos al silencio. A los terapeutas "alternativos" se les tilda de locos, se les retira la licencia o se les encarcela también. Los productos alternativos rentables han caído igualmente en manos de las multinacionales gracias a las normativas de la OMS y a las patentes de la Organización Mundial del Comercio. Las autoridades y sus medios de comunicación social se ocupan de alimentar entre la población el miedo a la enfermedad, a la vejez y a la muerte. De hecho, la obsesión por vivir más o, simplemente, por sobrevivir ha hecho prosperar incluso el tráfico internacional de órganos, sangre y embriones humanos. Y en muchas clínicas de fertilización en realidad se "fabrican" multitud de embriones que luego se almacenan para ser utilizados en cosmética, en tratamientos rejuvenecedores, etc. Eso sin contar con que se irradian los alimentos, se modifican los genes, el agua está contaminada, el aire envenenado...
Es más, los niños reciben absurdamente hasta 35 vacunas antes de ir a la escuela. Y así, cada miembro de la familia tiene ya su pastillita: el padre, la Viagra; la madre, el Prozac; el niño, el Ritalin.
Y todo esto, ¿para qué? Porque el resultado es conocido: los costes sanitarios suben y suben pero la gente sigue enfermando y muriendo igual.

LAS AUTORIDADES MIENTEN
-Lo que usted explica del sistema sanitario imperante es una realidad que cada vez más gente empieza a conocer pero nos han sorprendido algunas de sus afirmaciones respecto a lo que define como "las tres grandes mentiras de las autoridades políticas y sanitarias"...
-Pues lo reitero: las autoridades mienten cuando dicen que las vacunas nos protegen, mienten cuando dicen que el sida es contagioso y mienten cuando dicen que el cáncer es un misterio.
-Bien, hablemos de ello aunque ya le adelanto que en la revista no compartimos algunos de sus puntos de vista. Si le parece, podemos empezar hablando de las vacunas. A nuestro juicio, afirmar que ninguna vacuna es útil no se sostiene. Otra cosa, que sí compartimos, es que algunas son ineficaces y otras inútiles; a veces, hasta peligrosas.
-Pues yo mantengo todas mis afirmaciones. La única inmunidad auténtica es la natural y ésa la desarrolla el 90% de la población antes de los 15 años. Es más, las vacunas artificiales cortocircuitan por completo el desarrollo de las primeras defensas del organismo.
Y que las vacunas tienen riesgos es algo muy evidente; a pesar de lo cual se oculta. Por ejemplo, una vacuna puede provocar la misma enfermedad para la que se pone. ¿Por qué no se advierte? También se oculta que la persona vacunada puede transmitir la enfermedad aunque no esté enferma. Asimismo, no se dice que la vacuna puede sensibilizar a la persona frente a la enfermedad. Aunque lo más grave es que se oculte la inutilidad constatada de ciertas vacunas.
-¿A cuáles se refiere?
-Pues a las de enfermedades como la tuberculosis y el tétanos (vacunas que no confieren ninguna inmunidad), la rubéola (de la que el 90% de las mujeres están protegidas de modo natural), la difteria (que durante las mayores epidemias sólo alcanzaba al 7% de los niños a pesar de lo cual hoy se vacuna a todos), la gripe y la hepatitis B (cuyos virus se hacen rápidamente resistentes a los anticuerpos de las vacunas).
-¿Y hasta qué punto pueden ser también peligrosas?
-Las innumerables complicaciones que causan las vacunas -desde trastornos menores hasta la muerte- están suficientemente documentadas; por ejemplo, la muerte súbita del lactante. Por eso hay ya numerosas protestas de especialistas en la materia y son miles las demandas judiciales que se han interpuesto contra los fabricantes. Por otra parte, cuando se examinan las consecuencias de los programas de vacunaciones masivas se extraen conclusiones esclarecedoras.
-Le agradecería que mencionara algunas.
-Mire, en primer lugar las vacunas son caras y le suponen a los estados un gasto de miles de millones de dólares al año. Por tanto, el único beneficio evidente y seguro de las vacunas... es el que obtiene la industria. Además, la vacunación estimula el sistema inmune pero, repetida la vacunación, el sistema se agota. Por tanto, la vacuna repetida puede hacer, por ejemplo, estallar el "sida silencioso" y garantizar un "mercado de la enfermedad" perpetuamente floreciente.
Más datos: la vacunación incita a la dependencia médica y refuerza la creencia de que nuestro sistema inmune es ineficaz. Aunque lo más horrible es que la vacunación facilita los genocidios selectivos pues permite liquidar a personas de cierta raza, de cierto grupo, de cierta región... Sirve como experimentación para probar nuevos productos sobre un amplio muestrario de la población y es un arma biológica potentísima al servicio de la guerra biológica porque permite intervenir en el patrimonio genético hereditario de quien se quiera.
-Bueno, es evidente que hay muchas cosas de las que se puede hacer un buen o mal uso pero eso depende de la voluntad e intención de quien las utiliza. Bien, hablemos si le parece de la segunda "gran mentira" de las autoridades: usted afirma que el sida no es contagioso. Y perdone, pero así como el resto de sus afirmaciones en este ámbito nos han parecido razonadas y razonables no hemos visto que argumente esa afirmación.
-Yo afirmo que la teoría de que el único causante del Sida es el VIH o Virus de la Inmunodeficiencia Adquirida es falsa. Ésa es la gran mentira. La verdad es que tener el VIH no implica necesariamente desarrollar sida. Porque el sida no es sino una etiqueta que se "coloca" a un estado de salud al que dan lugar numerosas patologías cuando el sistema inmune está bajo. Y niego que tener sida equivalga a muerte segura. Pero, claro, esa verdad no interesa. Las autoridades nos imponen a la fuerza la idea de que el sida es una enfermedad causada por un solo virus a pesar de que el propio Luc Montagnier, del Instituto Pasteur, co-descubridor oficial del VIH en 1983, reconoció ya en 1990 que el VIH no es suficiente por sí solo para causar el sida. Otra evidencia es el hecho de que hay numerosos casos de sida sin virus VIH y numerosos casos de virus VIH sin sida (seropositivos). Por otro lado, aún no se ha conseguido demostrar que el virus VIH cause el sida, lo cual es una regla científica elemental para establecer una relación causa-efecto entre dos factores. Lo que sí se sabe, sin embargo, es que el VIH es un retrovirus inofensivo que sólo se activa cuando el sistema inmune está debilitado.
-Por cierto, usted afirma en su libro que el VIH fue creado artificialmente en un laboratorio...
-Sí. Investigaciones de eminentes médicos indican que el VIH fue creado mientras se hacían ensayos de vacunación contra la hepatitis B en grupos de homosexuales. Y todo indica que el continente africano fue contaminado del mismo modo durante campañas de vacunación contra la viruela. Claro que otros investigadores van más lejos aún y afirman que el virus del sida fue cultivado como arma biológica y después deliberadamente propagado mediante la vacunación de grupos de población que se querían exterminar.
-También observamos que ataca duramente la utilización del AZT para tratar el sida...
-Ya en el congreso sobre sida celebrado en Copenhague en mayo de 1992 los "supervivientes del sida" afirmaron que la solución entonces propuesta por la medicina científica para combatir el VIH, el AZT, era absolutamente ineficaz. Hoy eso está fuera de toda duda. Pues bien, yo afirmo que se puede sobrevivir al sida... pero no al AZT. Este medicamento es más mortal que el sida. El simple sentido común permite entender que no es con fármacos inmunodepresores como se refuerza el sistema inmunitario. Mire, el sida se ha convertido en otro gran negocio. Por tanto, se promociona ampliamente combatirlo porque ello da mucho dinero a la industria farmacéutica. Es así de simple.
-Hablemos de la "tercera gran mentira" de las autoridades: la de que el cáncer es un misterio.
-El llamado cáncer, es decir, la masiva proliferación anómala de células, es algo tan habitual que todos lo padecemos varias veces a lo largo de nuestra vida. Sólo que cuando eso sucede el sistema inmunitario actúa y destruye las células cancerígenas. El problema surge cuando nuestro sistema inmunitario está débil y no puede eliminarlas. Entonces el conjunto de células cancerosas acaba creciendo y formando un tumor.
-Y es en ese momento cuando se entra en el engranaje del "sistema de enfermedad"...
-Así es. Porque cuando se descubre un tumor se le ofrece de inmediato al paciente, con el pretexto de ayudarle, que elija entre estas tres posibilidades o "formas de tortura": amputarle (cirugía), quemarle (radioterapia) o envenenarle (quimioterapia). Ocultándosele que hay remedios alternativos eficaces, inocuos y baratos.
Y después de cuatro décadas de "lucha intensiva" contra el cáncer, ¿cuál es la situación en los propios países industrializados? Que la tasa de mortalidad por cáncer ha aumentado. Ese simple hecho pone en evidencia el fracaso de su prevención y de su tratamiento. Se han despilfarrado miles de millones de euros y tanto el número de enfermos como de muertos sigue creciendo.
Hoy sabemos a quién beneficia esta situación. Como sabemos quién la ha creado y quién la sostiene. En el caso de la guerra todos sabemos que ésta beneficia sobre todo a los fabricantes y traficantes de armas. Bueno, pues en medicina quienes se benefician son los fabricantes y traficantes del "armamento contra el cáncer"; es decir, quienes están detrás de la quimioterapia, la radioterapia, la cirugía y toda la industria hospitalaria.

LA MAFIA, UNA NECESIDAD EVOLUTIVA
-Sin embargo, a pesar de todo, usted mantiene que la mafia médica es una necesidad evolutiva de la humanidad. ¿Qué quiere decir con esa afirmación?
-Verá, piense en un pez cómodamente instalado en su pecera. Mientras tiene agua y comida todo está bien pero si le empieza a faltar el alimento y el nivel del agua desciende peligrosamente el pez decidirá saltar fuera de la pecera buscando una forma de salvarse. Bueno, pues yo entiendo que la mafia médica nos puede empujar a dar ese salto individualmente. Eso sí, habrá mucha gente que preferirá morir a saltar.
-Pero para dar ese salto es preciso un nivel de conciencia determinado.
-Sí. Y yo creo que se está elevando mucho y muy rápidamente. La información que antes se ocultaba ahora es pública: que la medicina mata personas, que los medicamentos nos envenenan, etc. Además, el médico alemán Ryke Geerd Hamer ha demostrado que todas las enfermedades son psicosomáticas y las medicinas no agresivas ganan popularidad. La mafia médica se desplomará como un castillo de naipes cuando un 5% de la población pierda su confianza en ella. Basta que ese porcentaje de la población mundial sea consciente de su propia divinidad. Entonces decidirá escapar de la esclavitud a la que le tiene sometida la mafia y el sistema actual se derrumbará. Tan sencillo como eso.
-¿Y en qué punto cree que estamos?
-Pues no sabría cuantificarlo pero pienso que probablemente en menos de 5 años todo el mundo se dará cuenta ya de que cuando va al médico va a un especialista de la enfermedad y no a un especialista de la salud. Dejar a un lado la llamada "medicina científica" y la seguridad que propone para ir a un terapeuta es ya un paso importante. También lo es perder el respeto y la obediencia ciega al médico. El gran paso es decir no a la autoridad exterior y decir sí a nuestra autoridad interior.
-¿Y qué es lo que nos impide romper con la autoridad exterior?
-El miedo. Tenemos miedo a no acudir al médico. Pero es el miedo, por sí mismo, quien nos puede enfermar y matar. Nos morimos de miedo. Se nos olvida que la naturaleza humana es divina, es decir, concebida para comportarnos como dioses. ¿Y desde cuándo los dioses tienen miedo? Cada vez que nos comportamos de manera diferente a la de un dios nos ponemos enfermos. Esa es la realidad.
-¿Y qué cree que pueden hacer los medios de comunicación para contribuir a la elevación de la conciencia en esta materia?
-Informar sin intentar convencer. Decir lo que sabéis y dejar a la gente hacer lo que quiera con la información. Porque intentar convencerles sería imponer otra verdad y de nuevo estaríamos en otra guerra. Se necesita sólo dar referencias. Basta decir las cosas. Luego, la gente las escuchará si resuenan en ellos. Y si su miedo es mayor que su amor por sí mismos dirán: "Eso es imposible". En cambio, si tienen abierto el corazón escucharán y se cuestionarán sus convicciones. Es entonces, en ese momento, cuando quieran más, cuando se les puede dar más información.


Laura Jimeno Muñoz


ACTORES DE LA MAFÍA MÉDICA
Para Ghislaine Lanctôt, los actores de La mafia médica son los siguientes:

-El paciente. Es el explotado por excelencia. Cuanto más enfermo esté mayores beneficios para la industria farmacéutica. En consecuencia, hay que mantenerlo enfermo y medicado.

-El médico. Es el vendedor inconsciente de los productos de la industria así como su instrumento de promoción. Las autoridades le forman de tal manera que estará al servicio de sus fines al pie de la letra, sin cuestionar jamás la sacrosanta verdad que se le inculca como doctrina. Según los casos, también se le puede sobornar con privilegios económicos, jerárquicos o ambos. En cuanto al terapeuta, simplemente es declarado ilegal y se le elimina, o bien se le integra y se le controla.

-Los hospitales, clínicas, laboratorios y farmacias. Son los distribuidores del fabricante, sus cómplices. Para eso se les paga bien. La recompensa por su buena disposición suele ser de orden crematístico.

-La industria. Es el explotador. El Padrino del sistema sanitario, el Gran Dictador y beneficiario de la enfermedad. Su inmenso poder oculto hace que se le sometan todos los niveles de "autoridades", ya sean del gobierno, médicas o mediáticas. Después de todo, es la industria la que concede el acceso al poder y la notoriedad. Lo que se pide, en contrapartida, es que nadie muerda la mano que le da de comer. Su lema es "Cuantos más pacientes enfermos, con mayor frecuencia y durante más tiempo, más rentabilidad". Todo vale para conseguirlo.

-Las autoridades. Son el usurpador. Han creado las instituciones y las leyes para apropiarse y desposeer al paciente de sus legítimos derechos sobre su salud. Para no despertar sospechas las autoridades se ocultan tras un biombo: el Gobierno. Las instituciones y los seguros se sitúan bajo su control directo o indirecto. Lo elegimos y financiamos nosotros pero nos traiciona vendiéndonos a la industria. En realidad, el gobierno y sus organismos ("las autoridades") son generalmente asalariados de la industria.

-La mafia de las mafias. El poder establecido no es sólo nacional. Por encima del sistema sanitario de cada país hay un sistema sanitario mundial, la Organización Mundial de la Salud (OMS), que dicta la política sanitaria global a seguir por todos los gobiernos del planeta.


fuente: http://www.dsalud.com/numero47_4.htm

viernes, 12 de junio de 2009

Comunicado Okupa La Idea

Nos ha llegado un comunicado de la Okupa La Idea del 10 de Julio de 2009 sobre la detención de un compañero de lucha, Cristian Cancino, que mediante montaje a sido arrestado por la PDI. Aqui les dejo el comunicado, favor difundir.
No kallemos los golpes del estado, no kallemos las injusticias del sistema, No nos kallemos JAMAS!!!!:

Cristian Cancino “Margarito”,Preso de los Montajes Policiales



El reciente martes 9 de junio se ha encarcelado a un compañero.

Cristian Cancino, apodado por sus compañerxs como “Margarito”, habitante de la okupación “la Idea”, esta preso mientras tú lees este comunicado.

Alrededor del medio día del martes, nos juntamos en el lugar conocido con el eufemismo de “Centro de Justicia de Santiago”, con el corazón cargado de amor hacia nuestro compañero Margarito y a la vez hinchado de odio y rencor en contra de nuestrx enemigx “El Poder”. La entrega del compañero seria de forma voluntaria, Pero, ¿por que razón se entrega voluntariamente?, dirán algunxs.

El pasado 27 de Mayo, Cristian es detenido por la PDI, acusado de guardar en sus pertenencias cierta cantidad de pólvora, Pólvora que la misma policía puso el día del allanamiento (viernes 22 de mayo). Luego de algunas horas detenido Margarito queda en “libertad”, pues no amerita detención preventiva según lo que señala la Justicia, sin embargo pasado algo mas que una semana, la Fiscalia apela en contra de nuestro compañero asegurando que es un peligro social y que al estar en libertad, podría escaparse. De esta forma la “entrega voluntaria”, con todo lo asqueroso que nos pueda significar, “no perjudicaría” en mayor cantidad al compañero.

Con la cabeza llena de contradicciones y de convicciones, jugamos este juego sucio, sin avalar ni por un segundo las leyes que nos asesinan, intentando reír para no llorar, esperando la llegada de los abogados, una llamada nos trasladaría, al metro Rondizonni ubicado a pocos metros de los centros de exterminio.

Ocho compañerxs y un abogado nos disponíamos a realizar el puto trámite, cuando nos vemos rodeados de unos veinte efectivos de policía civil, sarnosxs defensores de la ley, intentando arrebatarnos a Margarito.

La P.D.I, leyó nuestros movimientos, Tratando de adelantarse a los hechos, no querían que Margarito se entregase, eso haría caer las conjeturas, para culpabilizarlo, ellxs querían “capturarlo”, para así crear otro escenario, simular que este escapaba, sin embargo nadie se escaparía a metros de los tribunales y acompañado de su abogado. Frente a nuestra negativa de que se llevasen a nuestro compañero y en reacción a nuestros insultos y defensa, se crea un ambiente de pelea y discusión.

Sometidos una vez mas al apego a las “acciones legales”, y a la asesoria del abogado accedimos a que se fuese nuestro querido amigo y su defensa al cuartel de la putayuta, el momento de la despedida dolorosa llegaba rodeada de enemigxs, besos y abrazos a nuestro compañero, gritos y puteadas a lxs ratis, luego de la partida de sus feos autos, continuo la riña, mostrándonos sus armas y diciendo que nos “reventarían a golpes”, no nos intimidaron y continuamos manifestando nuestro odio y desprecio.

Luego de esto y compartiendo un jugo bajo en sol, conversamos y analizamos lo sucedido, el panorama no es bueno, sabiendo que quienes ostentan el poder y viven para hacer valer “la justicia”, son lxs primeros en transgredirla.
Nosotros no creemos en ellxs, ni en sus códigos de justicia y si hoy nos vemos condicionados a “dialogar” temas legales, es solo por el hecho, de estar obligados y depender de esto “la libertad” de nuestro compañero.

Con el correr de las horas nuestro compañero secuestrado, es llevado a la B.I.P.E (Brigada de Investigaciones Policiales Especiales), donde no sabemos que se dijo, luego es trasladado a la central de torturas ubicada en la calle Borgoño, donde un montón de periodistas convocados por sus colegas policías se aprestaban a continuar su show.
“Detienen a okupa prófugo por tenencia ilegal de explosivos”… Dirán los periódicos.

Luego de Burocráticas legalidades, Cristian queda recluido en el centro de exterminio Santiago 1, con posibilidades de ser cambiado de modulo dentro del mismo lugar, seguiremos informando sobre este tema.

Hacemos un llamado a la solidaridad activa y a la propaganda. Hoy esta preso nuestro compañero Margarito, pero sabemos como se han dado las cosas, podría ser cualquiera de nosotrxs, los servicios de inteligencia quieren desarticular a lxs antagonistas del poder, .nos creen una amenaza en potencia y está en nosotros convertirnos en verdaderas molestias y hostigamiento para este sistema.

Ellxs manejan el miedo y cuando lo saben utilizar, nosotrxs nos inmovilizamos. Debemos estar despiertxs y atentxs, esto no es un juego y recién esta comenzando, nos quieren apresar a unos cuantos a ver si nos callamos.

Nosotrxs como casa okupada “La Idea”, seguimos en pie, el Estado nos a robado un compañero, ya nada es igual, ya nada podrá ser lo mismo, no nos rendimos. Queremos a Margarito en la calle con nosotrxs, queremos el derrumbe de todos los muros de las cárceles, porque creemos y queremos la libertad y por que el Estado, El Capital y todas las formas de dominación, nos la impiden…., es que somos lxs eternxs enemigxs del Estado y El Poder, y lo saben por que nosotrxs asumimos las consecuencias de esta guerra, por que estamos fuertes y de pie.

10 De Junio, okupa “la idea”

martes, 9 de junio de 2009

Mienten sobre los piratas somalies ( adivinen los gobernantes de que pais miente )

La prensa internacional está mintiendo sobre los llamados “piratas somalíes”. Tanto así, que ésta es una de las 67 noticias nominadas para la selección anual de 25 noticias no difundidas por los grandes medios, del Proyecto Censurado 2009/2010. La verdadera naturaleza de lo que está ocurriendo en el Cuerno de África comenzó recién a conocerse cuando un juez de Nueva York decidió enjuiciar a un menor capturado el 12 de abril por EE.UU. en la costa de Somalía.

Con su artículo “Le están mintiendo sobre los piratas”, el periodista británico Johann Hari* arrojó bastante luz –en el Huffington Post del 4 de enero de 2009– sobre la verdadera naturaleza de este conflicto, provocado por los barcos occidentales que ilegalmente descargan basura nuclear y capturan los productos del mar del empobrecido país africano con más de 3.000 km de costa.
Del artículo de Hari se desprende que los verdaderos piratas son más bien las corporaciones de grandes potencias que encontraron ganancias fáciles en las aguas desprotegidas del país africano. En rigor, los “piratas” son patriotas somalíes que defienden sus alimentos de origen marino de la depredación de estadounidenses y europeos que los acusan de “piratas”.
Los somalíes observan impotentes cómo sus mares se convierten en un gran vertedero nuclear que acumula miles de toneladas de residuos radiactivos abandonados por grandes cargueros. Somalia es un país que hace casi dos décadas carece de guardacostas, desde que las guerras civiles (inducidas por las potencias occidentales) hicieron colapsar su sistema de gobierno. La injerencia de los países desarrollados promovió guerras civiles en todo el Cuerno de África en búsqueda de minerales lucrativos, fingiendo exportar “la democracia” o un “afán civilizador”
La guerra contra los “piratas” del subdesarrollo y la miseria está convirtiéndose en un aparente sustituto de la “guerra al terrorismo”, doctrina ya agotada para los propósitos del complejo industrial militar. Los mal vestidos y peor armados “piratas” han llegado a ser un nuevo objetivo militar que saca de su aburrimiento a la Real Marina Inglesa y a las ociosas fuerzas navales de una veintena de naciones poderosas, desde Estados Unidos a China, empeñadas ahora en combatir a un puñado de hambrientos que viven en un atraso similar al de Haití.

¿VILLANOS O HÉROES?

Los piratas de antaño fueron estigmatizados por el poder, pero siempre gozaron de popularidad entre los pobres. Citando al historiador Marcus Rediker, Hari asegura que primero trabajaron como marineros en “infiernos flotantes de madera”, donde hacían sus tareas encogidos y recibían castigos corporales, siendo frecuentemente engañados en sus salarios después de meses y años de trabajo. Pero estos “villanos” estuvieron entre los primeros en rebelarse contra este mundo; se amotinaron contra capitanes tiránicos y crearon una manera diferente de “trabajar” en los mares, escribió Hari. “Una vez que se hacían de una nave, los piratas elegían a sus capitanes y tomaban todas sus decisiones colectivamente”, o sea, anduvieron cerca de lo que hoy llaman “democracia participativa”. Para Rediker, pusieron en práctica “uno de los planes más igualitarios para encontrar recursos en el siglo 18”, e incluso admitieron esclavos africanos escapados y vivieron con ellos como iguales.
La piratería de hoy en Somalía es una actividad desesperada de sobrevivencia mediante cobro de peaje e impuestos a los depredadores. “El gobierno de este país del Cuerno de África colapsó en 1991. Desde entonces sus 9 millones de habitantes han estado sumergidos en el hambre y muchas de las fuerzas más feas del mundo occidental han visto esto como una gran oportunidad para robar las fuentes de aprovisionamientos de alimentos del país y descargar nuestra basura nuclear en sus mares”, explicó Hari.

Tan pronto como se fue el gobierno, en la costa de Somalía comenzaron a aparecer misteriosos barcos europeos descargando enormes barriles en el océano. La población costera comenzó a enfermarse. Primero sufrieron erupciones extrañas, náuseas y aparecieron bebés malformados. Y después, el tsunami de 2005 hizo flotar cientos de barriles que las olas lavaron en las playas. La gente comenzó a sufrir enfermedades producidas por la radiación y murieron más de 300 personas.
Ahmedou Ould-Abdallah, el enviado de ONU a Somalía, le dijo a Johann Hari: “Alguien está descargando aquí material nuclear. También hay metales pesados, tales como cadmio y mercurio”. Mucho de este material se puede rastrear en hospitales y fábricas europeas, donde se lo entregan a la mafia italiana para desaparecerlo a bajo precio. Cuando Hari le preguntó a Ould-Abdallah qué hacían los gobiernos europeos sobre esto, le respondió con un suspiro: “Nada. No hubo limpieza, ninguna compensación ni prevención”.

DEPREDACIÓN ICTIOLÓGICA

Al mismo tiempo, otras naves euro/estadounidenses han estado saqueando la biodiversidad de sus mares, su alimentación. “Ya hemos destruido nuestros propios peces con la sobre explotación y ahora hemos ido a capturar los suyos”, dijo el periodista británico, añadiendo que el precio de un atún supera los 300 dólares. Los barcos rastreadores que pescan ilegalmente en los mares desprotegidos de Somalia se han robado cientos de millones de dólares anuales de atún, camarón, langosta y otras formas de vida marina. Los pescadores locales perdieron repentinamente el sustento y ahora padecen hambre. Mohammed Hussein, pescador de la ciudad de Marka, le dijo a Reuters: “Si no se hace nada, pronto no nos habrán dejado ningún pescado en nuestras aguas de costa”.
Hari explicó que en este contexto aparecieron los hombres a quienes se ha estado llamando “piratas”. Cada uno está de acuerdo en que antes fueron simples pescadores somalíes, hombres de pesca ordinarios, que ahora consiguieron lanchas rápidas para intentar disuadir a los descargadores de basura y a los barcos rastreadores o, por lo menos, aplicarles algún impuesto. Se llaman a sí mismos “Guardacostas Voluntarios de Somalia” y es duro entender por qué: uno de los líderes pirata, Sugule Ali, dijo que su motivo era “detener la pesca ilegal y la descarga en nuestras aguas… No nos consideramos bandidos del mar. Consideramos bandidos del mar a quienes pescan ilegalmente y descargan en nuestros mares, botan basura en nuestras aguas y portan armas en nuestros mares”.
Pero los ‘piratas’ reciben el apoyo aplastante de la población local por una razón. El sitio somalí independiente de noticias WardherNews condujo la mejor investigación disponible sobre qué están pensando los somalíes comunes y corrientes y encontró que el 70% apoya fuertemente la piratería como forma de defensa nacional de las aguas territoriales del país”.

por Johann Hari, periodista británico del diario The Independent ha realizado coberturas en Irak, Israel/Palestina, Congo, República Centroafricana, Venezuela, Perú y EEUU, y sus investigaciones han aparecido en publicaciones por todo el mundo.


fuente: el ciudadano